Disfruta del buen ambiente: Con la calefacción en invierno y el aire acondicionado en verano, ¡normal que notes que tu piel y tu garganta están más resecas! Pero, ¿cómo saber cúal es el porcentaje de humedad que necesita tu casa? El humidificador se encarga de mantener el grado de humedad adecuado para que tú no tengas que preocuparte.
Respira a gusto: El humidificador alivia los síntomas de la sinusitis y de las alergias. Y si eres fumador o asmático, notarás que respirar aire con el grado de humedad óptimo te va a costar menos esfuerzo. Además podrás utilizarlo con esencias para perfumar el ambiente. ¡Como en casa, en ningún sitio!
¡Descansa como nunca! ¡Pshhhh! Si hay bebés durmiendo, no te preocupes porque el humidificador no va a despertarles. Además de silencioso es ideal para prevenir los catarros de los más pequeños porque crea una atmósfera agradable para que duerman tranquilos. De esa forma, ¡tú también puedes dormir a pierna suelta!
